CAYÓ UNA PAREJA DE ESTAFADORES GITANOS QUE ENGAÑABA POR TELÉFONO A ABUELOS DE LA REGIÓN

Fueron atrapados en Mar del Plata. Y hubo allanamientos en Mataderos, CABA, y otros puntos de la provincia. La investigación la hizo DDI de Trenque Lauquen. Los operativos fueron coordinados por el fiscal local Cortelezzi. Secuestraron autos y yates y gran cantidad de dinero en efectivo

Una pareja de la comunidad gitana fue detenida acusada de estafar a decenas de víctimas de la región y la provincia de La Pampa bajo la modalidad del “cuento del tío”, haciéndole creer mediante llamadas telefónicas y depósitos bancarios sobre un “corralito”, o un cambio de moneda inminente.

Los dos detenidos fueron identificados como Julio Brian Miguel, de 18 años, y su acompañante Lucía Miguel, de 44 años, ambos miembros de la comunidad gitana, y fueron atrapados en un operativo coordinado por el fiscal Leandro Cortelezzi, UFI N° 2 de Trenque Lauquen, tras una investigación llevada adelante por agentes de la DDI de Trenque Lauquen .

Los señalados fueron detenidos en la ciudad de Mar del Plata, y hubo varios allanamientos concertados en la Ciudad de Buenos Aires (CABA) en forma conjunta por el personal de la DDI de Trenque Lauquen y la Policía de la Ciudad, a raíz de distintas denuncias de robos ocurridos en las ciudades de Carhué, Pigüé, Francisco Madero, Pehuajó, Dolores y General Madariaga, en los que robaron $489.000, U$S31.900 en efectivo y alhajas de oro a víctimas mayores de edad.

En los allanamientos las autoridades policiales detectaron que estos delincuentes en depósito su domicilio guardaban cuantiosas propiedades automotrices/embarcación de alta gama que fueran informadas a los fiscales actuantes, como lo son Lancha Fishing 551 con motor Mercury; dos Picks Ups Toyota Hilux, automóvil Chery QQ Light, etc.

Los detenidos, imputados por los hechos cometidos en la zona, enfrentan cargos por “estafas y tentativas de estafas reiteradas” y quedaron a disposición de la Justicia de Trenque Lauquen.

Según pudo saber DataTrenque, mediante llamadas telefónicas los estafadores entablaban comunicación con potenciales víctimas (generalmente mayores/ancianas), y las lograban convencer mediante un ardid que eran familiares. Luego les daban indicaciones para que entregaran dinero simulando “secuestros virtuales”. También, mediante la misma modalidad de estafa telefónica, el engaño hacía referencia a un cambio de la moneda en curso y que un supuesto empleado bancario se acercaría al domicilio con inmediatez, aduciendo inminente “corralito” y/o desvalorización moneda.

Las tareas de investigación incluyeron el análisis de cámaras de seguridad y rastreo satelital, las que permitieron identificar la utilización de un vehículo VW Gol por parte de los sospechosos para cometer los ilícitos.