Delincuentes desconocidos ingresaron en un establecimiento rural y sustrajeron entre 20 y 30 garrafas de 10 kilos vacías de distintos colores, apoderándose de un botín cercano a un valor de un millón y medio de pesos.
Si bien no trascendió la ubicación del establecimiento asaltado, se sabe que además los delincuentes se apoderaron de la cadena y el candado del galpón donde estaban guardadas las garrafas.
El hecho habría tenido lugar en el último mes y medio, dato que ahora la pesquisa intenta determinar, según pudo conocer DataTrenque.